El edema, o hinchazón de los tejidos, es una reacción normal a la inflamación y la lesión. La hinchazón protege la zona afectada y promueve la reparación de los tejidos. Si la causa de la hinchazón es clara, por ejemplo un tobillo roto o una picadura de insecto, y no existen otros síntomas, generalmente se resolverá por sí sola en pocos días.
¿Tienes los tobillos hinchados o el rostro hinchado? El edema también puede ser causado por una gran variedad de otras condiciones, como quemaduras solares, consumir demasiada sal, estar de pie mucho tiempo y el embarazo. Es un efecto secundario bien conocido de ciertos medicamentos, como los esteroides. El edema persistente o crónico puede indicar una causa subyacente más grave.
El edema, también conocido como retención de líquidos o hidropesía, es la hinchazón que resulta de la acumulación excesiva de líquido en los tejidos, pero ¿de dónde proviene este líquido?
El líquido circula por todo el cuerpo como plasma rodeando los glóbulos rojos y las plaquetas en nuestros vasos sanguíneos, moviéndose a través de pequeños poros en los capilares como líquido intersticial transportando gases disueltos, nutrientes y electrolitos en los pequeños espacios entre las células, y regresando a la sangre a través de los vasos linfáticos como líquido linfático.
El plasma, el líquido intersticial y el líquido linfático son todos líquidos extracelulares: agua que contiene azúcares, sales, ácidos grasos, aminoácidos, coenzimas, hormonas, neurotransmisores, glóbulos blancos y productos de desecho celular disueltos. La composición de estos líquidos varía un poco según dónde se encuentren en el sistema circulatorio.
Al bombear el corazón, ejerce presión sobre el sistema circulatorio. Cuando los tejidos se dañan o inflaman en alguna parte del cuerpo, puede filtrarse líquido hacia los tejidos circundantes causando la hinchazón de la zona. El exceso de filtración de líquido también puede ocurrir cuando las membranas del sistema circulatorio son influenciadas, por ejemplo, por ciertas hormonas o medicamentos y se vuelven más permeables.
Algunos de los principales síntomas son:
El edema como consecuencia de inflamación aguda o traumatismo contuso puede estar acompañado de mareo, náuseas, confusión, rigidez y otros síntomas.
El edema puede resultar de una amplia variedad de condiciones. Algunas son leves y temporales, mientras que otras pueden ser crónicas o indicar una enfermedad grave. Las causas más comunes incluyen:
En algunos casos, cierto tipo de edema puede indicar una condición de salud grave como enfermedad renal, enfermedad pulmonar, cirrosis hepática, venas varicosas, enfermedad tiroidea, insuficiencia cardíaca congénita o diabetes.
La forma más común de edema ocurre justo debajo de la piel—con más frecuencia en las piernas y pies, brazos y manos, o rostro—cuando la red de pequeños capilares en esa zona está bajo presión o dañada.
El edema periférico, o hinchazón en las piernas o brazos, es muy común tras estar de pie o sentada mucho tiempo, usar ropa ajustada, quemaduras de sol o comer alimentos con exceso de sal. El edema periférico también es frecuente durante el embarazo y puede ser consecuencia de los cambios hormonales durante el ciclo menstrual.
La hinchazón en los pies se denomina específicamente edema pedal y es sumamente común en mujeres embarazadas y personas mayores de 65 años.
El edema pulmonar se da cuando el líquido se acumula en los pulmones. Esto puede ser muy peligroso ya que afecta la capacidad de respirar. Los síntomas incluyen dificultad para respirar, mayor dificultad en la noche o al estar acostada, sibilancias y tos, y a veces aumento rápido de peso. Contacta de inmediato a los servicios de emergencia si el edema pulmonar aparece súbitamente o si está acompañado de sudoración, jadeo, tos con sangre, palpitaciones, ansiedad y sensación de ahogo.
El edema macular es la hinchazón en el ojo, más específicamente en la mácula—una zona sensible en el centro de la retina, en la parte posterior del ojo, responsable del procesamiento de la visión central y los detalles finos. Si se acumula líquido en esta zona, la visión se vuelve borrosa y puede cambiar la percepción de los colores. El edema macular a veces es una complicación de la diabetes.
El edema cerebral ocurre cuando se acumula líquido en el cerebro. Esto suele causar deterioro de la función nerviosa, aumento de la presión intracraneal y posible compresión cerebral. Los síntomas incluyen dolor de cabeza, náuseas, vómitos, convulsiones, somnolencia o alteraciones visuales y cognitivas. El edema cerebral es frecuente en lesiones cerebrales, pero también puede deberse a reacciones alérgicas, gran altitud, tumores y otras causas. Siempre busca atención médica en caso de un traumatismo en la cabeza o el corazón.
Casi cualquier parte del cuerpo puede inflamarse, incluidas las zonas alrededor de los órganos internos, pero esto sucede con menos frecuencia y puede ser difícil de identificar sin formación o equipo especializados.
Una sencilla prueba de godete puede ayudar a determinar cuánta cantidad de líquido se ha acumulado en los tejidos. Presiona suavemente un dedo en la zona hinchada durante 5–15 segundos, suelta y observa. Si permanece una hendidura tras retirar la presión, hay exceso de líquido en los tejidos. La profundidad de la hendidura y el tiempo que tarda la piel en volver a la normalidad te indica cuánta acumulación de líquido hay.
GRADO HINCHADURA TIEMPO REBOTE
1 2mm inmediato
2 4mm menos de 15 seg
3 6mm 15 a 60 seg
4 8mm 2 a 3 min
Para aliviar la hinchazón o la retención de líquidos en alguna parte del cuerpo, primero debes identificar la causa subyacente, para tomar las medidas adecuadas y lograr alivio.
Si no existe un problema grave añadido, hay varias estrategias que puedes probar para ayudar al proceso de recuperación. Si la causa es el sobreesfuerzo con calor o el consumo excesivo de sal, la hinchazón probablemente desaparezca de forma natural después de unas horas o tras una buena noche de sueño.
Si la hinchazón es un problema habitual en tu vida, cambios en el estilo de vida o medicación podrían ser necesarios.
Asegúrate de llevar una dieta equilibrada, rica en nutrientes, que incluya frutas y verduras frescas. Reduce la sal (sodio) y el alcohol en tu dieta y considera dejar de fumar si eres fumadora. El agua sigue a la sal en el cuerpo. Si hay un exceso de sal en los riñones, tu cuerpo retendrá agua para diluir la concentración y eliminarla del sistema.
La actividad física es fundamental para un cuerpo saludable y una circulación equilibrada. Realiza ejercicio suave para reducir la hinchazón existente. Cuando el edema se resuelva, entrena un poco más intensamente para prevenir problemas futuros.
Eleva las piernas (o la zona afectada) al sentarte o acostarte para mejorar la circulación de líquidos. Puedes hacerlo apoyando los pies sobre una almohada o pequeño taburete mientras trabajas, o tumbándote con las piernas levantadas y descansando sobre una almohada o contra la pared.
El masaje y la acupuntura pueden ser muy útiles para mejorar la circulación sanguínea y linfática, pero si hay hinchazón, asegúrate de detenerte si el masaje resulta doloroso.
Las medias de compresión o manguitos pueden ayudar a igualar la presión en el cuerpo. Las medias son ideales para uso prolongado si buscas alivio del dolor y la hinchazón, así como una mejor circulación. Los manguitos también reducen la hinchazón de la parte inferior de las piernas y son habituales en atletas y alpinistas para contrarrestar los efectos de la actividad física exigente y los cambios de presión. Si eres propensa a hinchazón en pies y tobillos, también existen zapatos especializados para edema.
Los diuréticos pueden proporcionar alivio de la hinchazón al ayudar al cuerpo a liberar más sodio en la orina, eliminando así una de las causas de la retención de agua—expulsas el exceso de sal y agua. Deben usarse solo como solución a corto plazo. Los diuréticos se usan frecuentemente para tratar la hinchazón causada por insuficiencia cardíaca congestiva y enfermedad hepática.
La hinchazón debida a coágulos sanguíneos puede tratarse con anticoagulantes.
Los antihistamínicos suelen emplearse para aliviar la hinchazón y picazón causada por alergias.
El edema es una reacción fisiológica natural ante muchos tipos de enfermedades y lesiones. Como las posibles causas son tan variadas, el tratamiento efectivo depende de identificar la causa concreta. El ejercicio moderado regular, una dieta equilibrada y elevar los pies y las piernas son tratamientos eficaces para la inflamación y el hinchazón cotidianos de pies y rostro.
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