El sexo sin penetración, también conocido como sexo externo, es sexo sin penetración sexual. Existen diversas razones por las cuales una persona podría preferir esto sobre el sexo con penetración, incluyendo preferencia, seguridad, limitaciones mentales y físicas, así como límites personales.
Aunque es algo más seguro que el sexo tradicional con respecto al embarazo no planeado y las ETS, todavía existen riesgos involucrados en las interacciones íntimas, por lo que aún deben tomarse algunas precauciones. Practicar sexo seguro aplica para todos los tipos de sexo.
Hay cierta ambigüedad en la definición de sexo sin penetración. Puede referirse a sexo sin penetración vaginal o anal pero que aún incluye aspectos penetrantes, como el sexo oral o la estimulación con dedos. O puede significar sexo que excluye cualquier y todo tipo de penetración.
Mucha gente piensa en el sexo sin penetración como los juegos previos: los besos, el masaje erótico y compartir fantasías sexuales, todo esto podría considerarse sexo dependiendo de la definición personal de cada una.
El sexo sin penetración incluye actos como:
Habrá quienes se pregunten por qué siquiera es necesario explorar el sexo sin penetración. Este modo de pensar es estancado, capacitista y heteronormativo. Una mejor pregunta sería: ¿por qué no explorar tus opciones?
El sexo sin penetración es ideal para:
El sexo sin penetración también es una opción en situaciones donde quienes participan desean evitar la penetración por motivos de seguridad; o en cualquier otra situación donde la penetración es indeseada, inconveniente o irrelevante.
Condiciones como el vaginismo y la disfunción eréctil pueden hacer que la penetración sea dolorosa, difícil o incluso imposible (sin provocar un trauma importante a alguna de las personas).
El vaginismo suele estar relacionado con el miedo al dolor, que puede basarse en experiencias dolorosas previas o en expectativas indeseadas. La disfunción eréctil también suele vincularse a miedos y expectativas—como el temor de ser 'menos que' lo que se considera un 'hombre de verdad', capaz de mantener una erección firme durante mucho tiempo con facilidad. Estos ideales falsos provienen en gran parte de la pornografía, que muestra representaciones exageradas e irreales de la masculinidad.
Las relaciones sexuales requieren un cierto nivel de confianza entre las parejas y comodidad para explorar la propia sexualidad y la de la otra persona. Muchas de nosotras formamos barreras conscientes o inconscientes para protegernos emocionalmente, lo que puede dificultar una intimidad que requiere vulnerabilidad. Derribar esas barreras es posible, pero es un proceso que necesita tiempo, ausencia de presión, autoreflectividad honesta y, idealmente, alguien seguro a tu lado.
Es fundamental reconocer que una parte de la población nunca tendrá sexo con penetración. Este hecho no debería considerarse menos válido que la experiencia sexual que se espera entre dos personas heterosexuales, sin discapacidad.
Si no hay otra razón, el 'sexo externo' es una forma de enriquecer tu vida sexual y descubrir tu cuerpo: ¿Qué me da placer? ¿Cuáles son mis límites? No hay ninguna razón para quedarse atascada en un solo modelo de juegos previos, coito y orgasmo, en ese orden. La mayoría de las personas tienen deseos y necesidades que van más allá de esa fórmula tradicional y se beneficiarían enormemente de la normalización de un repertorio sexual más diverso.
Sí, puedes. El embarazo es el resultado de una función biológica. El esperma no se preocupa por cómo llega hasta el óvulo; siempre intentará fecundarlo.
Aunque evitar la penetración disminuye el riesgo de embarazo no deseado, no es imposible que ocurra durante el sexo sin penetración entre un hombre y una mujer. Los espermatozoides pueden sobrevivir fuera del cuerpo durante varias horas, lo cual es suficiente para que se produzca un intercambio de fluidos de forma accidental.
Ejemplos:
Las posibilidades son muchas. Es importante estar atenta no solo a lo que sucede con la eyaculación, sino también con el líquido preseminal, pues también contiene esperma. Si se quiere evitar el embarazo, lo mejor es prepararse para el sexo sin penetración igual que se haría para el sexo con penetración (dentro de lo razonable). Si normalmente tomas anticonceptivos o utilizas un lubricante espermicida, no hagas una excepción solo porque no parece tan necesario.
De igual forma, no decidas no hacerte una prueba de embarazo solo porque la probabilidad de un resultado positivo es menor. Ante la duda, más vale prevenir que lamentar.
El sexo sin penetración ofrece aún menos protección frente a las enfermedades de transmisión sexual (ETS) que contra el embarazo no deseado.
Los métodos de barrera son los únicos anticonceptivos que resultan eficaces contra las ETS. Estos incluyen preservativos masculinos y femeninos, y barreras de látex dentales (porciones finas y flexibles de látex que protegen contra el contacto directo boca-genital o boca-ano durante el sexo oral). Sin embargo, aunque los utilices correctamente, si llegas a tener fluidos de tu pareja cerca de tus genitales o boca, corres el riesgo de infección.
El frotamiento en seco desnuda también puede transmitir ciertas ETS, como el herpes y el VPH, aunque no haya intercambio de fluidos. Usar ropa interior hace que el frotamiento en seco sea más seguro, aunque puede que no prevenga todo el contacto genital piel con piel ni evite totalmente los fluidos. Algunas ETS pueden encontrarse en zonas que la ropa interior no cubre siempre (como la parte superior de los muslos o las nalgas).
No importa qué tipo de sexo pienses tener, asegúrate de que ni tú ni tu(s) pareja(s) tengan una ETS. Hacerse la prueba en una clínica de salud sexual es rápido y sencillo. Algunas ETS no presentan síntomas, así que es completamente posible que una persona aparentemente sana sea portadora de una enfermedad sin saberlo. Si la prueba resulta positiva, infórmate sobre tus opciones. Muchas ETS comunes son completamente curables si se detectan a tiempo—una excelente razón para hacerse pruebas periódicas.
Todo esto puede sonar abrumador, pero es mejor saber cómo tomar precauciones que te protejan de riesgos potenciales. ¡Cuídate y no tengas miedo de explorar!
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